LAS CLASES MEDIAS LLEVARÁN A PEPE A LA GUBERNATURA
Línea Caliente
Por Edgar Hernández*
Si bien el respaldo de las clases bajas sustantivas en las elecciones 2024 ya que es donde Morena tiene comprada a una parte de su clientela electoral, para el Frente Amplio Opositor el desafío está en las clases medias.
Serán las que lleven al triunfo a Xóchitl y a los 9 candidatos a las gubernaturas por el PAN-PRI-PRD y Movimiento Ciudadano, entre ellos el aspirante por Veracruz, Pepe Yunes.
En Veracruz, cuarta reserva electoral de la república con un padrón superior a los 6 millones de votantes según datos del INEGI, las clases medias son cada vez más amplias y de cara a la decepción ciudadana serán las que se vuelquen en las urnas el 3 de junio del año próximo.
Al Frente Amplio Opositor, a través de sus sondeos estadísticos, le queda claro que hoy día lo relevante habrá de ser la autodefinición ciudadana.
La realidad es que, tanto en términos económicos como en su relevancia política, la definición de la clase media históricamente ha sido muy elusiva tendencia que hoy, de cara a la emergencia nacional, muestra una tendencia contraria.
El más reciente estudio del INEGI da cuenta que el 42 por ciento de los hogares y al 37 por ciento de las personas son de clase media y un análisis de “El Financiero” revela que en el ámbito urbano esos porcentajes clasemedieros llegan a 45 y 50 por ciento respectivamente, mientras que en las zonas rurales son de 24 y 28 por ciento.
En algunas ciudades de hecho puede estimarse que las clases medias representan la mayoría de la población.
Veracruz.
En la entidad la migración campo-ciudad ha sido exponencial y una importante proporción ciudadana se ha ido por la economía formal cuyo salario mensual promedio es de 16 mil pesos y a ello se han sumado los propios empleadores.
Y aunque no hay ninguna definición clara respecto al sentido del voto que emitieron las clases medias en el 2018, evidencias diversas concuerdan en que una parte muy importante de ellas votó por López Obrador y sus propuestas -como la que significó en mala hora para Veracruz, Cuitláhuac García- para el 2024 se presume que no asumirán el mismo comportamiento electoral.
A nivel nacional las intenciones de voto por Claudia Sheinbaum en los careos con Xóchitl Gálvez se quedan en el 46 por ciento frente a 37 por ciento de la candidata opositora y un 8 por ciento de un hipotético candidato de Movimiento Ciudadano (Samuel García, por ejemplo), a lo que se suma un 9 por ciento de indefinidos.
Esta estructura de preferencias es muy prometedora para la oposición, considerando que Gálvez lleva apenas 3 meses en el escenario nacional.
En Veracruz, regresando a tan importante plaza, según se ha podido observar, el tema Nahle poco ha impactado en la ciudadanía por el tema de la corrupción que la rodea y para el 52% de las mujeres -mayoría en la entidad- la oriundez de la zacatecana ha provocado un serio rechazo.
Por tanto, el potencial de crecimiento de las intenciones de voto del Frente es hoy mayor al de Morena.
En la contraparte, Pepe Yunes en el día a día se ha venido posicionando.
Con un discurso fuerte, opositor y una narrativa convincente en materia económica y financiera, así como una exigencia de llevar a Veracruz a un estadio de seguridad por medio del combate al crimen organizado sin pelear con sus adversarios, ni poniéndose al tú por tú con Cuitláhuac García y sí con su forma de gobierno, le ha concitado la simpatía ciudadana.
Conocedor de los problemas sociales de los 212 municipios y cosechando los resultados de sus gestiones legislativas que tanto solo en los últimos años lo llevó a conseguir recursos financieros superiores a los tres mil millones de pesos para 89 alcaldías, avanza.
Va rumbo a la nominación sin temor a que la ciudadanía le de la espalda cuando se haga la consulta base de la cual ya hay indicios estadísticos hechos públicos.
Hay confianza en él y su honestidad, así como en su compromiso de no rodearse de rémoras y hacer de la pluralidad partidista, con la participación ciudadana un equipo de trabajo que lo lleve a formar un gobierno de coalición.
Y es que, el que hayan sido un grupo de organizaciones civiles y ciudadanos en favor de la creación del Frente fue determinante para el éxito del posicionamiento.
Una muestra de ello -tal como le hemos venido sosteniendo en este espacio- fue lo sucedido en las elecciones del 2021, comicios en los cuales la oposición logró triunfar en la mayoría de las grandes ciudades a nivel nacional y, por supuesto, en Veracruz en donde el 85 por ciento del voto fue urbano y solo el 15 por ciento fue de carácter rural.
Uno de los retos fundamentales de la oposición es, por tanto, propiciar la participación electoral de las clases medias, del votante urbano de clases medias, para elevar de manera importante la tasa de participación.
Las clases medias son mayoría, una mayoría que hoy tienen en sus manos el poder del cambio.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo