LA GANADORA DE LA BECA JENKINS DEL TORO: CAROLINA REVILLA
Foto © FICG / Adrián Salazar
Guadalajara, Jalisco, 11 junio 2025.- Carolina Revilla Casillas fue presentada como la ganadora de la Beca Jenkins – Del Toro 2025 en el marco de la edición 40 del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG).
Para hacer el anuncio oficial, conformaron el presídium de la conferencia de prensa Daniela Yoffe Zonana, coordinadora de Extensión y Difusión Cultural de la Universidad de Guadalajara; Guillermo Gómez Mata, presidente del Festival internacional de Cine en Guadalajara; José Trinidad Padilla López, presidente de la Fundación Universidad de Guadalajara; Consuelo Castillo, representante del jurado de la Beca Jenkins – Del Toro 2025; y Alejandra Lerdo de Tejada, directora de comunicación de la Fundación Jenkins.
“Este tipo de iniciativas y de becas cumplen sueños, y definitivamente que tanto la Universidad, comprometida como siempre con la creación cultural, artística, con el impulso de sus estudiantes y de esta oportunidad en colaboración con Festival, con la Fundación Universidad de Guadalajara y la Fundación Jenkins hacen posible este sueño, que es crear un piso parejo, sembrar una semillita para que nuestros estudiantes y los creadores puedan tener acceso a estudiar, a dibujar esa historia en cualquier lugar”, expresó Daniela Yoffe Zonana, en representación de Karla Alejandrina Planter Pérez, Rectora General de la Universidad de Guadalajara.
Después de proyectar dos videomensajes de felicitación, de Robert Jenkins de Landa, director de la Fundación Mary Street Jenkins, y el cineasta mexicano Guillermo del Toro, la representante del jurado presentó a Carolina Revilla Casillas como la sexta ganadora de esta beca, quien espera estudiar una maestría en Producción Ejecutiva o Distribución en la Universidad Ramon Llull, en Barcelona, España.
“La decisión final la tomamos con una persona que nos hizo pensar y soñar en el futuro a través del corto que realizó. Que, además, sus palabras llegaron al alma y que consideramos que el camino que tiene va ser muy grande, no sólo para ella, sino para la industria cinematográfica”, comentó Consuelo Castillo.
Carolina Revilla Casillas subió al estrado mostrándose emocionada por obtener esta beca que le permitirá seguir creciendo profesionalmente en la industria de la animación, en la cual ya cuenta con una experiencia de dos años con series animadas que incluyen la técnica de stop motion y un cortometraje independiente.
“Podría estar hablando horas de cómo esto probablemente va a cambiar mi vida, pero creo que más que nada quiero agradecer a esta comunidad que se ha formado y sobre todo también en Guadalajara. Creo que como cineastas la tenemos bien difícil desde el día uno, parece que todo está en contra de ti y creo que por eso somos una de las comunidades más hermosas que existen de cualquier industria.
“Tomo esto como una bendición, pero también como una responsabilidad. Quiero ir y aprender todo lo que pueda; pero que no sólo quede ahí, sino aprender para regresar y unirlo al talento mexicano, que hay muchísimo. Espero hacer esa comunidad para los que vienen”, expresó la ganadora.
La Beca Jenkins-Del Toro, que se entrega desde 2019, otorga un apoyo anual de 60 mil dólares estadounidenses para la realización de estudios de cinematografía en nivel licenciatura o maestría. Los recursos son aportados en su totalidad por la Fundación Jenkins y cubren gastos de colegiatura, estancia (costo de la vivienda en renta durante el tiempo que duren los estudios), manutención (alimentos), contratación de un seguro de gastos médicos y de vida, así como una cantidad fija para solventar gastos de libros y materiales de estudio.
ENTREVISTA CON LA SEXTA GANADORA DE LA BECA JENKINS – DEL TORO
¿Cuáles fueron tus primeros acercamientos o qué momentos de tu vida recuerdas que te acercaron al cine?
A mí me pasó algo muy extraño: nunca hubo un momento específico. Desde el kínder, cuando hacían la típica pregunta de «¿qué quieres ser de grande?», yo decía «cine». No sé de dónde lo saqué, pero siempre seguí ese instinto. Lo confirmé o me sentí realmente segura de ello cuando tenía 15 años y fui voluntaria en el Festival de Cine Guanajuato. Fue una experiencia increíble. Ver cómo se grababa, cómo pasaba todo a la pantalla, y ver a toda la gente que formaba una comunidad. Ahí supe que sí, quería formar parte de algo tan grande y colectivo.
¿Hay alguna producción que te haya hecho decir: “yo quiero hacer algo así”?
Me da un poco de pena no decir Tarkovski o algo así, pero la verdad es que un proyecto que me marcó mucho fue la serie animada Avatar: La leyenda de Aang. Creo que fue la primera vez que vi una serie para niños que podía ser divertida, pero también profunda, con un arte y una música hermosos. Siento que ha sido una gran inspiración para mí. Siempre será un referente de lo que quiero lograr: crear algo con tanta sensibilidad que conecte con todo el mundo, y en especial con los niños.
Como joven creadora, ¿qué tan importante ha sido para ti trabajar con otras mujeres creadoras?
La codirectora de mi corto Manita es Alexa García, y para ella siempre fue muy importante que el proyecto fuera hecho mayoritariamente por mujeres. Tal vez al principio yo no veía tan clara esa necesidad, pero una vez que empezamos a trabajar en un set 100% femenino, me di cuenta de lo especial que era. Era un espacio íntimo, muy cuidado. No se trataba de excluir, sino de darle oportunidad a mujeres que tal vez no tenían mucha experiencia en la industria. Fue hermoso porque de ahí nació una comunidad y un colectivo llamado Muyo, formado por varias mujeres jóvenes que trabajan en animación. Me di cuenta de lo valioso que es hacer equipo con otras mujeres y apoyarnos entre nosotras.
Además de esta comunidad que ustedes han construido como espacio formativo, ¿consideras que los festivales también pueden tener esa función?
Definitivamente. Uno de los espacios más formativos para mí siempre han sido los festivales. Creo que muchas veces cuando estudias en una cierta universidad, tienes un molde, pero no hay otra manera de abrirte más que viendo cine, conociendo gente. Hay grandes oportunidades en festivales como este, porque si ves a los directores en persona, puedes preguntar directamente tus dudas y es una cátedra de conocimiento increíble que no hay que desperdiciar.
¿Qué representa para ti la Beca Jenkins – Del Toro?
Para mí fue muy significativo porque me hizo darme cuenta de lo grande que es esta comunidad y de cómo existe una generación comprometida con seguir apoyando a los jóvenes. Sin ese respaldo, muchas veces no podríamos seguir avanzando en la industria. Para mí, la beca representa tanto una bendición como una responsabilidad: la de seguir aprendiendo todo lo que pueda y, en el futuro, convertirme en parte de esa generación que apoye a quienes vienen detrás.
Dentro de la escena nacional de la animación, ¿hay alguien con quien te gustaría trabajar en un futuro?
Una de ellas es Rita Basulto, soy una fan. Ver Humo (2023) fue muy significativo para mí, sobre todo por la técnica que utiliza; nunca había visto algo así. El juego con el papel me tocó mucho. Pero también tengo muchas ganas de volver a trabajar con quienes fueron mis compañeros. Hay muchísima gente de mi generación haciendo stop motion, como Andrea León y Alexa García, y me encantaría volver a trabajar con ellas. Para mí, no sólo es importante buscar a los grandes maestros, sino también buscar seguir creando cosas frescas con tu propia generación.