Cultura

INTERNAUTAS PRECISAN CUIDADOS DIGITALES

·      Hay que buscar formas de hacer y usar las tecnologías, así como software libre, sugirió Irene Soria Guzmán

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En 2022, 20.8 por ciento de las mujeres mayores de 12 años fue víctima de ciberacoso, alertó Germán Téllez Leal

 

“Me avisas cuando llegues” es una de las frases recurrentes en el contexto actual en nuestro país, pertenece a una de las estrategias de vigilancia que implementamos a diario, dinámicas que presencialmente usamos en nuestro entorno, en un barrio, y que podrían replicarse en internet, aseguró Irene Soria Guzmán, licenciada en Diseño y Comunicación Visual por la Facultad de Artes y Diseño de la UNAM.

 

La especialista en hackfeminismo (movimiento feminista que lucha contra el robo de información y la violencia digital) dejó en claro que las y los internautas requieren cuidados digitales. “El Internet no se reduce a las redes sociales, nos adentramos en este para habitarlo (como en un barrio) y eso demanda estrategias de autocuidado”.

 

Doctorada en Estudios Feministas por la Universidad Autónoma Metropolitana, Xochimilco, la también activista del movimiento del software y cultura libre dictó la conferencia “Cuidados digitales” en la cual recordó que el “autocuidado”, término establecido de manera colectiva, tiene que ejercerse por cualquier persona usuaria de la red de redes.

 

Como parte del programa “Cultura de la Denuncia”, enmarcado en las actividades por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer 25N, celebrado en la sala virtual de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza de la UNAM, Soria Guzmán presentó diez acciones erróneas en formato de mitos, que en algunos casos se ejercen como navegantes de internet, y algunas sugerencias para enfrentarlas.

 

“No tengo nada que ocultar”, la privacidad es importante, solo imaginemos ¿a quién le estamos dando las llaves de nuestra casa? “La misma contraseña para todo”, es mejor cambiarla temporalmente, alternar números, letras y caracteres, incluso poner la frase de alguna canción que pueda ser fácilmente recordada por quien la usa.

“La violencia digital es mi culpa por no cuidarme”, en este caso hay que usar mensajería que tenga autodestrucción de archivos como Signal o Telegram; si se requiere ayuda se puede acudir a sitios como Denuncia.org; Ciberseguras; Frente Nacional por la Sororidad; Vita-activa; o Acoso online.

 

“Si sufro acoso es porque un hacker entró a mi computadora”; “Revisar mi correo o mis redes en equipos públicos no representa un riesgo”; “Nadie recordará lo que diga o suba a redes en algunos años”; “Las redes sociales escuchan mis conversaciones para presentarme anuncios de productos”.

 

“Entre mejor estén mis contenidos, más likes y seguidores tendré y seré una persona exitosa”; “Se puede ser totalmente anónimo en internet”; y “No podemos hacer frente al poder de las redes sociales digitales”.

 

Ante este panorama, la especialista consideró: “se puede hacer frente a internet, a las redes sociales y a la inteligencia artificial porque eso no funciona sin los humanos. Los usuarios aún tenemos el poder, nada de lo anterior lo es sin los inputs, sin la información que les damos, por ello hay que buscar formas de hacer y usar las tecnologías, así como software libre”.

 

Acoso virtual

 

En México, en 2022 la población de 12 años y más que utilizó internet en cualquier dispositivo electrónico fue de 105.8 millones de personas; 20.8 por ciento de ellas (17.4 millones) resultó víctima de ciberacoso; 9.8 millones fueron mujeres y 7.6 millones hombres, refirió el subdirector estatal de Difusión en la Coordinación Estatal Sur de la Ciudad de México, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Germán Téllez Leal.

 

Destacó que de acuerdo con el módulo de ciberacoso de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de las Tecnologías de la Información en los Hogares (Endutih) 2022, el más frecuente que experimentaron ellas y ellos fue el contacto mediante identidades falsas; la mayor prevalencia de esta conducta se registró en Tlaxcala, seguido de Yucatán y Tabasco.

 

Como parte de su charla, “Violencia y ciberacoso”, con base en estadísticas del INEGI indicó que el acoso virtual es una vertiente que crece debido al predominio de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), que permean en la mayoría de la población.

 

Cada persona tenemos un smartphone, una tableta, o nuestro trabajo implica hacer uso de internet, entramos a correos, etcétera, lo que significa tener una “llave para todo” y que podría tomarse de forma perjudicial por algunas personas, alertó.

 

En el encuentro híbrido organizado por el Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, en ocasión de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer 25N, mencionó:

 

Desafortunadamente hay quienes utilizan estos nichos para efectuar actos indebidos, por ejemplo las TIC son tan avanzadas que ahora con la inteligencia artificial cualquiera puede replicar la voz de otros, incluso su imagen, lo que implica que se puede hacer mal uso de datos personales para realizar extorsión u otro delito.

 

Téllez Leal comentó que, de julio de 2021 a agosto de 2022, 59.9 por ciento de los hombres y 67.6 por ciento de las mujeres que utilizaron internet fueron víctimas de acoso virtual y experimentaron enojo, seguido de desconfianza, miedo, estrés, inseguridad, frustración, nervios, ansiedad, incluso se han visto casos graves de bullying de jóvenes quienes se quitan la vida.

Según frecuencia y distinción por sexo, el tipo de ciberacoso que las mujeres vivieron de manera más recurrente fue el rastreo de cuentas o sitios web visitados, 47.5 por ciento. En tanto que los varones recibieron insinuaciones o propuestas sexuales virtuales en 41.8 por ciento, describió.

 

Se empleó Facebook; WhatsApp; llamadas por teléfono celular y fijo; Messenger; mensajes SMS; correo electrónico personal e institucional; X o Twitter; TikTok; Telegram y YouTube. Asimismo, 61.8 por ciento de los varones y 73.6 de las féminas de 12 años y más, tomaron acciones como bloquear personas, cuentas o páginas, precisó Téllez Leal.

 

 

FUENTE: UNAM

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