PEGA SEQUÍA A LOS ÁRBOLES EN CHAPULTEPEC
Manuel Alejandro Álvarez Torres
Agencia Reforma
Ciudad de México 17 marzo 2025.- El arbolado no nativo del Bosque de Chapultepec es afectado por el calentamiento y la sequía, alertaron especialistas consultados.
«Un factor a considerar en la declinación de estos individuos (árboles), además de su edad, es el hecho de la falta de horas frío, que influyó en un mal desarrollo morfológico», expuso el experto del Instituto de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias, Héctor Benavides.
Autor de diagnósticos de arbolado en el parque urbano, dijo que el cambio climático ha sido determinante.
«Se agravó con el incremento de la temperatura por efecto del calentamiento global y de la isla de calor urbana en la CDMX», indicó.
La transpiración de las hojas de los árboles carece de agua suficiente para recuperarse, en el ambiente y en la irrigación.
«Aunado a la falta de riego que se ha presentado en una gran parte del Bosque y la sequía que ha afectado a la Ciudad y que exacerba la demanda evaporativa de los individuos», apuntó.
REQUIERE ATENCIÓN ESPECIAL
El Bosque de Chapultepec muestra a sus visitantes zonas diversas de arbolado muerto en pie, debido a que enfrentan condiciones adversas.
Un programa de atención es urgente, aseguró el investigador del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), Héctor Benavides.
«Merece una atención especializada para su protección, conservación y mejoramiento, particularmente de su masa arbolada», anotó el especialista, quien en la década reciente se ha ocupado de inventariar los árboles de Chapultepec.
En épocas anteriores sobresalió la ausencia de especialistas forestales, subrayó el experto en un estudio de diciembre de 2024.
«La carencia de una directriz técnica en materia de arboricultura influyó en las condiciones de este pulmón capitalino, hasta la formación de la Junta Superior del Bosque de Chapultepec», expuso.
Esa junta renovó la vegetación a partir de 1895, arbolado que, más de un siglo después, se encuentra en riesgo, con amplias porciones de ejemplares declinantes.
«Está enfrentando nuevas condiciones ambientales adversas derivadas del calentamiento global e incremento de la isla de calor urbana», subrayó.
El cambio climático representa condiciones que en la historia de Chapultepec han ocurrido.
Desde la época prehispánica, en el Cerro del Chapulín hubo veneros proveedores de agua, a través del acueducto con vestigios en Avenida Chapultepec, para Tenochtitlan y el centro de la Ciudad, hasta que se desecaron a fines del siglo XIX.
En la calzada del Rey y debajo del Castillo, en el área en donde aún hay letreros que ubican uno de los manantiales, subsisten ahuehuetes, considerados el árbol nacional, algunos regados con pipas.
A principios del siglo XX fueron introducidas especies de árboles exóticos llamativos por su follaje, los cuales en su mayor parte desaparecieron, agregó Benavides.
«Pocas de esas especies sobrevivieron al entorno del Bosque de Chapultepec y de la Ciudad de México», puntualizó.
CAMPOSANTO
En otro estudio sobre el Panteón Civil de Dolores, Benavides reportó que en esa área con 112 hectáreas, situada entre la Segunda y la Tercera Sección de Chapultepec, hay 19 mil árboles.
«Se estimó que alrededor de 14 mil 500 individuos arbóreos requieren un trabajo de poda y sería necesario el derribo de otros mil 500 para evitar un posible daño a personas o monumentos funerarios», subrayó.
Predominan truenos, cedros, fresnos y eucaliptos, algunos de los cuales se aprecian secos, desde la Línea 3 del Cablebús, sin hojas en las ramas.
Desde las cabinas del teleférico también se observan palmeras muertas alrededor del Lago Menor de la Segunda Sección, remanentes de unas 40 que hubo y las cuales en su mayor parte fueron derribadas desde 2022.
En el parque Líbano de Chapultepec, sobre Paseo de la Reforma, fresnos afectados por plagas fueron removidos.
En El Sope, eucaliptos marcados por listones amarillos aguardan su retiro ante el riesgo de caída sobre caminantes y corredores.
