ADICCIÓN AL SEXO
Salvador Farfán Infante
¿Hay factores bioquímicos en la Adicción al Sexo?
Se hipotetiza el déficit de serotonina, un neurotransmisor que modera el sexo, y de endorfinas, que son las responsables de incrementar el grado de satisfacción sexual. El hecho de que los adictos al sexo tengan como condición indispensable un alto impulso sexual, presupondría un gasto continuado y una búsqueda excesiva de la dopamina, el neurotransmisor que pone en marcha la motivación sexual.
¿Porcentajes de otros trastornos asociados a la Adicción al Sexo?
- 32% presentaban también adicción a tóxicos, siendo más de la mitad al alcohol.
- 18% habían sido compradores compulsivos.
- 11% adicción compulsiva a la comida.
- 8% adicción al ejercicio físico.
- 5% juego patológico. En algunos casos compartían estas adicciones; en otros se mostraban adictos “en cadena”.
- 39% estaban deprimidos.
- 14% presentaban ansiedad generalizada.
- 13% eran obsesivos.
Un porcentaje no señalado podían presentar rasgos de conductas impulsivas.
¿Existe un tratamiento para la Adicción al Sexo?
El tratamiento psicológico se basa en la terapia cognitivo conductual y consiste en:
• Aprendizaje de respuestas de evitación ante las situaciones de riesgo (control de estímulos) y exposición programada a las señales de peligro con extinción de los deseos de la conducta adictiva.
• Técnicas de reestructuración y distracción cognitiva
• Identificación de señales de estrés, ansiedad y otras circunstancias de peligro.
• Terapia de pareja y terapias individualizadas para los trastornos clínicos o de personalidad.
Si hay resistencias terapéuticas o peligro de recaídas, protocolizamos la utilización de fármacos potenciadores del efecto serotonina en el cerebro (con acción triple: inhibición del impulso, control de la impulsividad y reducción de la compulsividad) y, en casos graves, podría considerarse adecuada la utilización de fármacos anti andrógenos o similares. No obstante, esto último no acostumbra a ser necesario y se reservaría para conductas parafílicas resistentes y/o peligrosas.
¿Qué son las parafilias?
Las más comunes son:
El fetichismo, el exhibicionismo, la pedofilia y el voyeurismo, siendo la más frecuente la pedofilia, si bien los datos epidemiológicos son desconocidos, ya que proceden de la clínica o de cifras judiciales o policiales. La edad de inicio suele ser en la adolescencia, y no siempre es exclusiva, pudiendo coexistir con conducta normativa. Es frecuente la comorbilidad con trastornos de la personalidad, abuso de sustancias, trastornos depresivos e hipersexualidad no controlada.
Es muy difícil encontrar una causa común, y se han planteado diversas teorías que comprenden desde el aprendizaje temprano hasta factores constitucionales, pasando por T. de personalidad y antecedentes de abusos sexuales.
El tratamiento se basa en técnicas específicas de tipo cognitivo-conductual para suprimir o atenuar la sexualidad parafílica y potenciar una conducta sexual más normalizada y aceptable. Como coadyuvante, pueden utilizarse tratamientos farmacológicos, como pueden ser algunos antidepresivos que reducen el deseo sexual y disminuyen las características impulsivas y compulsivas de la conducta. En casos muy graves y resistentes se utilizan antiandrógenos.
Fuente: Psicodex